Julia Alvarez Iguña

Julia Alvarez Iguña

Psicología On Line

Psicología On Line
j.iguna@hotmail.com

Psicología de Deportes

Psicología aplicada al Golf

Jugar en equipo. Deporte y politica

domingo, 23 de octubre de 2011


Articulo publicado en Correo de Lectores del diario La Nación. 22/10/2011
Jugar en Equipo

"Los Pumas nos han dejado muchas enseñanzas. Mas allá del coraje y la grandeza desplegada, han demostrado lo que es saber jugar en equipo.
"Hoy estamos viviendo una sensación semejante en cuanto a las próximas elecciones. Nos encontramos con dos equipos. Uno de ellos, la oposición, está formada por diferentes partidos que luchan por el mismo objetivo de vencer al Gobierno, pero que, lamentablemente, no saben jugar en equipo.

"Sería una gran demostración de humildad el poder unirse relacionándose con lo más importante de cada partido, renunciando a intereses personales en un verdadero pensar juntos, sabiendo que por separado no se puede conseguir nada. En un equipo no sirven personas aisladas, talentos individualistas o jugadores estrella. Estos factores producen una lucha de egos, competencia, celos y hostilidad. En la oposición todos quieren tener la pelota, pero no la saben pasar, y solo con la arenga no se gana ningún campeonato, ninguna elección. La pelota comunica y, en este caso, seguramente terminará de nuevo en manos del mismo rival."

Julia Iguña

Tu vida esta en tu presente



“La vida no te está esperando en ninguna parte, te está sucediendo. No se encuentra en el futuro como una meta que has de alcanzar, está aquí y ahora, en este mismo momento, en tu respirar, en la circulación de tu sangre, en el latir de tu corazón. Cualquier cosa que seas es tu vida y si te pones a buscar significados en otra parte, te la perderás.”

La felicidad esta dentro de nosotros. Ni la psicología ni la filosofía pueden prometernos la felicidad eterna, pueden aclarar ciertos aspectos, pero el camino lo debemos transitar y elegir nosotros solos. Vivir tu presente, tu "aquí y ahora" proviene de la psicología de Kierkegaard, Sartre y Heidegger, en oposición a lo que hasta esa época se pensaba donde la felicidad estaba ligada a un futuro y para poder alcanzarla era necesario el esfuerzo, el sacrificio, el renunciamiento a los placeres presentes.

Te dejo esta lectura de José Saramago

Frecuentemente me preguntan que cuántos años tengo... ¡Qué importa eso!. Tengo la edad que quiero y siento. La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso. Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido. Tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos. ¡Qué importa cuántos años tengo!. No quiero pensar en ello. Unos dicen que ya soy viejo y otros que estoy en el apogeo. Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte. Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos. Ahora no tienen por qué decir: Eres muy joven, no lo lograrás. Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo. Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos, y las ilusiones se convierten en esperanza. Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada. Y otras en un remanso de paz, como el atardecer en la playa. ¿Qué cuántos años tengo? No necesito con un número marcar, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones rotas... valen mucho más que eso. ¡Qué importa si cumplo veinte, cuarenta, o setenta!. Lo que importa es la edad que siento. Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos. Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos. ¿Qué cuantos años tengo? ¡Eso a quién le importa!. Tengo los años necesarios para perder el miedo y hacer lo que quiero y siento.